martes, 14 de diciembre de 2010

Microliteratura IV

Ya estoy vaciándome de recuerdos (micro)literarios, estoy agotando mi archivo de boludeces escritas hace rato. .

Esta vez, una tanda más de pavadas escritas en aquel pasado cercano que me veía menor de edad.

Cloaca P.M.


Un cloaca almuerza y sin cepillarse los dientes sale de su casa. Charla con varios cloacas más, mientras fuma un cigarrillo de marihuana. Tiene chiche nuevo, un reproductor de mp3. Muestra el objeto y, de antemano, explica que es un obsequio de sus padres. El grupo igualmente se burla de el y lo llaman virtual. Se ríe de si mismo. Vuelve a casa tarde, con olor a humo y se acuesta sin cenar.


Virtual A.M.


Un virtual despierta prende el ordenar y se va a bañar. Sale de la ducha envuelto en su bata celeste y se sienta delante del monitor. Una hora después, tras descubrir a otros pocos virtuales online, se digna a vestirse y dar fin a su ayuno. Unos quince minutos luego vuelve al cyberespacio donde poco y nada sucede, se acomoda en su silla y tras clickear y clickear, su madre tres horas más tarde llama a almorzar.



Como por contagio


-Veo, veo
-¿Qué ves?
-...
-¿Qué ves?
-...
-¡Boludo!¡Toy podrido de que te hagas el pajero y no contestes!
-...
-...
-...
-...


Mirones


-Zarpadas tetas tenía la guacha...
-¿Qué se murió?
-Creo que no... fijate allá abajo, ¿está?
-Si, pero las tiene un toque más caídas...


Hist*eria


Enojada saco su garrote y se lo partió en la cabeza. Ya en la prehistoria existía la infidelidad.


Más de una vez


Un niño que ya conocía, pero que no recordaba de donde, me saludaba desde la tapa de un libro. Lo abrí y me perdí. Ahora recuerdo claramente: el niño me hizo caer nuevamente en su trampa. Desde chico me gustaba leer este libro.


Grito al cielo


Tengo una obsesión con un tipo de mujeres, Me excitan esas que tienen las nalgas gigantes y celulíticas. Esas que tienen los senos rechonchos y cabizbajos. Me derriten las que tienen en el abdomen tantas grasas que este, al tocarlo, consigue un movimiento gelatinoso casi perfecto.
Lástima que en mi país, esas mujeres que logran conseguir ese Edén corpóreo solo se ven en televisión. Por eso es que quiero hacer público mi grito al cielo: ¡Por favor políticos hagan algo para parar esta maldita desnutrición!


1 comentario:

  1. Son complicados de entender, me quedan ganas de seguir leyendo y no hay mas texto jajaja finales bastantes abiertos

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